5 consejos fundamentales para dar clases en grupo
Si eres un/a profesor/a particular que hace clases particulares en grupo habitualmente, o estás empezando en esta modalidad, os proponemos unos consejos que os van a ayudar a realizar una clase grupal con éxito.
Es aconsejable, que si es nuestra primera vez como profesor/a de clases grupales, empecemos con un solo alumno, para luego ir aumentando progresivamente con 2 o 3 alumnos. A medida que vamos cogiendo experiencia podremos hacer grupos con más alumnos. Es imprescindible que aprendamos a gestionar bien el tiempo que dedicamos a cada alumno, y más importante aún, que tengamos herramientas para comprobar que los otros alumnos siguen trabajando correctamente.
Tenemos que tener en cuenta si la clase en grupo va a ser online o presencial, ya que las dos modalidades tienen sus propias normas o consejos.
A continuación, os detallaremos los 5 consejos más importantes a tener en cuenta cuando hagamos una clase en grupo.
1. Pregunta con frecuencia y mantén la atención
En una clase presencial nos será fácil controlar a los alumnos que tengamos. Una opción para controlar bien a un grupo de 2 a 6 alumnos es colocar 3 mesas en forma de U y que el profesor se ubique en el centro. Esto permitirá que todos los alumnos estén a la misma distancia del profesor, y este podrá vigilarlos constantemente.
Si realizamos una clase online, tenemos que tener en cuenta que podemos perder algunos de los aspectos que sí tenemos en una clase presencial. Al no tener contacto directo con nuestros alumnos nos será más difícil comprobar si lo que estamos explicando se está entendiendo bien. Para solucionar estos problemas, tendremos que contar con una buena cámara web para poder grabarnos correctamente y una buena conexión a internet (también podemos conectar directamente el router con el ordenador mediante un cable). También tendremos que preguntar a menudo a nuestros alumnos si se está entendiendo correctamente todo aquello que estemos explicando.
2. Contacto cara a cara
Es importante que podamos ver la cara de nuestros alumnos y ellos nuestra cara. Esto facilitará la interacción durante la clase. En una clase presencial no tendremos este problema, no obstante en una clase online sí lo podemos tener. Es muy recomendable que al inicio y al final de la clase nos enfoquemos y nos despidamos, enfocando nuestra cara. Si vemos que tenemos problemas de conexión o el ancho de banda de internet es bajo, podemos conectar directamente el ordenador al router mediante un cable, o bien podemos saludar o despedirnos del alumno y luego apagar la cámara. Eso también nos facilitará concretar otra clase si conviene.
3. Controla el tiempo
Como profesores tenemos que gestionar bien el tiempo que dedicamos a nuestros alumnos y ser conscientes del tiempo que tardarán en resolver los ejercicios que estén haciendo. Habrá alumnos que terminarán antes que otros, y otros que requerirán más de nuestra atención. Para todos ellos, tenemos que tener recursos para trabajar (por ejemplo, si somos profesores de matemáticas, podemos tener ejercicios de ampliación para los alumnos que veamos más adelantados o bien ejercicios de refuerzo, para aquellos alumnos que lo necesiten).
En una clase presencial nos será más fácil controlar el tiempo que dedicamos a cada alumno. Sin embargo, en una clase online, y más si apagamos la cámara, nos podemos despistar y dedicar más tiempo a un alumno que a otro. Para evitarlo, tendremos que preguntar a cada alumno, cada 5-10 minutos, para que este sienta que estamos allí para cualquier cosa que necesite. Si vemos que estamos muy ocupados, le podemos decir al alumno que haga otro ejercicio y luego le corregimos o le contestamos la pregunta que nos haya formulado.
4. Recursos digitales
Hoy en día, podemos encontrar en internet infinidad de aplicaciones y programas que nos pueden facilitar mucho nuestras clases particulares. Les podemos recomendar videos educativos, artículos o aplicaciones como Photomath o Symbolab que nos permiten resolver multitud de ecuaciones, derivadas, integrales, etc.
Estas aplicaciones nos permitirán corregir rápidamente los ejercicios en los alumnos o que ellos mismos se las corrijan. Cuando detectemos un error, tendremos que revisarlo manualmente para ver dónde está el fallo, para así comunicárselo al alumno.
Si queremos, les podemos mandar ejercicios para hacer en casa y que ellos mismos con estas aplicaciones se los autocorrijan, y en la próxima clase nos comenten solo los que estén mal. Mediante estas aplicaciones podremos ir mucho más rápido en nuestras clases. No obstante, tendremos que ser conscientes de que a veces veremos procedimientos “extraños”, y aunque sea una herramienta útil, no debemos olvidar que a veces habrá alumnos que se pueden equivocar en el procedimiento pero que el resultado les dé bien. (Por ejemplo, se pueden olvidar dos veces de un signo negativo, o que no expresen bien los paréntesis, etc.) En definitiva, podemos usar muchas herramientas pero siempre será recomendable que las supervisemos, sobretodo los resultados y los procedimientos.
5. Establece unas normas
Es importante que cuando tengamos grupos, tanto online como presenciales, nuestros alumnos sepan cómo trabajamos.
Si todos los alumnos tienen el mismo nivel y la misma asignatura o materia, realizaremos la explicación a toda la clase y luego les preguntaremos si tienen alguna duda.
Si tenemos grupos mixtos, es decir, en que cada alumno tiene tareas distintas, tendremos que ir por turnos. Dedicaremos unos minutos a un alumno, resolveremos las dudas que tenga y le mandaremos ejercicios. Mientras ese alumno esté trabajando, iremos a otro alumno, y así sucesivamente. Cuando acabemos con todos, volveremos al primer alumno y le corregiremos o le resolveremos las dudas que tenga.
Es muy importante que en esta modalidad cada alumno pueda trabajar en algún momento de manera autónoma. Nos puede pasar que un alumno haya acabado la actividad o tenga dudas antes de que le toque su turno. En ese caso, podemos tener preparado material complementario para que pueda seguir trabajando, o bien le podemos decir que si se atasca en algún ejercicio que no sabe hacer, pruebe de hacer otro o repase la teoría del tema que esté dando.
Esto lo podemos hacer tanto en una clase online (mandando un enlace o una foto con ejercicios para hacer) o en una clase presencial (tendremos que tener libros o hojas impresas que podamos facilitarles en cualquier momento).
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